Entonces advirtió que estaba en cuatro patas. Permaneció un tiempo así, quizá meditando, quizá no. Quien sabe, es posible que la señora Xavier estuviera cansada de ser un ente humano. Era una perra de cuatro patas. Sin ninguna nobleza. Perdida la altivez última. En cuatro patas, un poco pensativa, tal vez.
Empecé a escribir una historia. Al poco tiempo me percaté de que ya había vivido este momento horas, días o años antes. Decidí dejarlo. La historia, pensé, ya está escrita.
Se necesita mucho valor para ser idiota, opinan algunos. Pero ¿No es la idiotez la fuente de toda valentía?
Permanece despreocupado, toma la vida como una hora ligera y un tiempo dulce y fugaz, no espera nada de los otros sino todo de él mismo en tanto que otro. Su divisa es Todavía.
Según algunos testigos, el rescate se complicó porque algunos de los chicos creyeron que se trataba de un juego y volvían a entrar en el pabellón en llamas.
Le clavaron algo metálico en la parte superior de la cabeza. Después empezaron a pelarla en espiral. La mandarina había quedado desnuda ante la mirada de todos los comensales. RIP.
A un hombre depresivo le hacen una radiografia del cerebro, que le mostró su mente como un gran vacío. Tuvo tal decepción que se suicidó pegandose un tiro en la cabeza.
Um homem e uma mulher vivem separados até os 25 anos. Vivem juntos por um mês.Tão juntos, que ele passa a viver no corpo dela, e ela no corpo dele. Eles se separam e nunca mais se encontram.